10 abril, 2010

Historias de la muerte de Stuart Sutcliffe

Un día lo trajeron de la escuela de arte, se había desmayado como consecuencia de los constantes dolores de cabeza que sufría, llegando incluso a no poder caminar por las constantes jaquecas y desmayos que aquello le provocaba. Muchas son las historias sobre su muerte, pero según comentó Astrid, el ex Beatle cayó enfermo, postrado en la cama, pálido, falleciendo en la ambulancia camino al hospital. La mitología Beatle también crea comentarios amarillistas, donde se cuenta que John en una de sus iras, pateó a Sutcliffe en la cabeza; una golpiza que posiblemente condujo a la enfermedad de Stuart. Astrid ha negado dichos comentarios maliciosos alegando que John jamás siquiera levantó su mano contra Stuart, porque lo que mantenía a estos dos tipos juntos era el respeto, cariño y admiración mutua.

Después de haber tocado una noche en el Litherland Town Hall, en el norte de Liverpool, los “Silver Beatles” fueron sorprendidos mientras salían por su camioneta. En la pelea, Stu resultó golpeado y pateado en la cabeza. Esa lesión es la que repercutiría en Stuart más tarde. En 1961 el grupo había realizado su segunda gira por Hamburgo, Alemania, y al final la banda regresa a Liverpool, menos Stuart, quien decide quedarse más tiempo para desarrollar más su inclinación por la pintura. En esa época, era cuando Stu había comenzado su relación sentimental con Astrid Kirchherr (inspiradora del famoso peinado “Mop Top” Beatle y muy amiga de estos). El 10 de abril del año siguiente, 1962, moriría a consecuencia de una hemorragia cerebral, contando apenas con 21 años, justo en la víspera de la tercera gira del grupo por esa ciudad y dias después del lanzamiento del primer single de The Beatles “Love Me Do”.

La autopsia dio como resultado que la causa de su deceso fue producto de una hemorragia cerebral, que lo inundó y causó su muerte.

También hay historias de cómo reaccionó Lennon al enterarse que su amigo había fallecido. John, endurecido tras la muerte de su madre, afrontará la perdida de su amigo con forzada frialdad.

Según Astrid Kirchher, cuando les dio a la banda la triste noticia, Pete Best simplemente rompió en llanto, Paul la abrazó para consolarla, y John enloqueció. Enloqueció tanto que rió hasta llegar al llanto.

Cualquiera que fuera la combinación de amor, miedo o culpa que haya provocado tal reacción en Lennon, la muerte de Stuart lo aplastó, forzándolo a volverse hacia Paul para obtener la verdad emocional y artística, hasta que ni siquiera pudo confiar en él, y se volvió hacia Yoko. Tal vez la muerte de Stuart estuvo con él por el resto de su vida.
Tiempo después, en casa de Astrid, John pidió ser fotografiado en el estudio donde Stu pintaba sus óleos, posando igual que su difunto amigo.

Este fue el triste final del Beatle trágico y romántico, Stuart Sutcliffe, del que su legado es una aclamada colección de pinturas que han sido exhibidas en todo el mundo.

Stuart Sutcliffe


En el verano de 1961, Astrid notó que estaba ausente y a menudo se quejaba de fuertes dolores de cabeza que le provocaban ceguera y mareos. En los próximos meses, perdió peso y estaba constantemente enfermo.

Médicos alemanes le hicieron pruebas de estrés por su "temperamento artístico". Las pruebas de los rayos X en el hospital no mostraron nada fuera de lo común. A finales de agosto, Stuart llegó a casa en Liverpool con su novia alemana, quien tuvo una reunión incómoda con su madre al presentarlas, ya que los recuerdos de la Segunda Guerra Mundial aun se encontraban frescos en la mente de Millie Sutcliffe.

La madre de Stuart quería hacerse cargo de su cuidado por temor a su regreso a Hamburgo, ya que eso significaba que le perdería para siempre. El trajo de Alemania sus pruebas de rayos x para obtener una segunda opinión, pero no llegó a su cita en un hospital de Liverpool. Es un misterio siquiera pensar lo que le pudieron haber diagnosticado. En noviembre, la vida de Stuart y la carrera de Los Beatles se habían transformado por un capricho del destino: Brian Epstein, el propietario de una tienda de discos de Liverpool los vio tocar por primera vez en el Cavern Club y el resto es historia.

El viaje coincidió con una nueva recaída en la salud de Stuart. Los dolores de cabeza y desmayos fueron empeorando. En enero de 1962, sufrió un ataque convulsivo en su clase de arte. Los médicos no encontraron la causa. De haber sido diagnosticado hoy en día las posibilidades de un tratamiento eficaz le pudieron haber salvado la vida.


El siguiente mes, Stuart regresó a casa en Liverpool para lo que sería su última visita, su madre Millie se sorprendió al ver su aspecto demacrado. Vio tocar a los Beatles en el Cavern Club y no le sorprendió ver lo lejos que habían llegado, sintiéndose orgulloso de ellos sin lamentarse nunca de haberlos dejado ya que se había separado de John en buenos términos.

John nunca volvió a ver a su gurú y mejor amigo de nuevo: Stuart falleció el 10 de abril de 1962 en Hamburgo. La madre de Astrid escuchó un grito y encontró a Stuart en agonía. El médico dijo que había sufrido una hemorragia cerebral. Stuart murió en brazos de su novia mientras la ambulancia volaba camino al hospital. Justo en la víspera de la tercera gira del grupo por esa ciudad y días después del lanzamiento del primer single de los Beatles “Love Me Do”. Tenía 21 años.


En uno de esos curiosos giros del destino, John, Paul, George y el baterista Pete Best volaron a Hamburgo el día siguiente. Fueron recibidos en el aeropuerto por Astrid quien recordó: "Todos saltaron de felicidad al verme. Pero tuve que darles la triste noticia de que Stuart había muerto. Pete se puso a llorar, Paul me abrazó fuertemente, George enmudeció y el que más me asustó fue John, ya que empezó a carcajearse de manera descontrolada hasta que las lágrimas aparecieron en su rostro”.

Ninguno de los Beatles asistió a su funeral en la Iglesia de San Gabriel. En lugar de ello, siguieron la antigua máxima de que el espectáculo debía continuar. Hoy, los lienzos de Stuart se venden por sumas importantes, como culto a esa tragedia en la vida de Los Beatles, ya que la banda le tenía un gran afecto.

George dijo: "Yo tenía muchas peleas con Stu, pero me agradaba y fuimos muy amigos antes de su muerte. Mi ego nada más me decía que solamente no era un buen músico. Estuvo en la banda por que John le había convencido que comprara un bajo. De forma misteriosa, Stuart –por influencia no sólo de Astrid, sino del público alemán- fue el responsable de la imagen que teníamos.”


Según Yoko Ono, el afecto que John sentía por su mejor amigo nunca despareció. Fue él quien insistió que Stuart ocupara un lugar junto a sus otros héroes de la niñez, en la portada más icónica del mejor álbum de todos los tiempos. Este fue un homenaje personal de Lennon a un amigo que también fue un mentor.

Se dice que la muerte de Stuart aplastó emocionalmente a Lennon, forzándolo a volverse hacia Paul para obtener la verdad emocional y artística, hasta que ni siquiera pudo confiar en él, y se volvió hacia Yoko. Tal vez la muerte de Stuart estuvo con él por el resto de su vida. John dijo: "Yo dependía de Stuart para que me dijera la verdad. Si Stu me decía que algo era bueno, entonces yo le creía".

Descansen en paz Stu, John y George… Strawberry fields forever…







1 comentario:

Anónimo dijo...

que pena nadie supo sobre el aun que encontraron la cura para su enfermedad en este ahora no hubo en su tiempo para salvarlo pero que en paz descanses stuar sclutffel