Ocurrió un ya lejano 25 de noviembre de 1993. Exactamente un año antes, U2 había pisado por primera vez tierras mexicanas dentro de su histórico ZOO TV Tour y sólo cuatro meses después, Pink Floyd desplegaría sus láseres en la capital azteca. Pero aquel último fin de semana de noviembre de 1993, le perteneció a un solo artista: Paul McCartney. McCartney utilizó aquella oportunidad para relatarnos a los presentes la historia de su vida por medio de una variada lista de canciones, que era un recorrido inolvidable por los distintos momentos de su carrera musical. Impensable, completamente inimaginable, era a inicios de la década de 1990 que los músicos más importantes de los últimos 30 años visitaran México. Haciendo a un lado la todavía inexplicable visita de Queen a inicios de los 80, nuestro país no entraba jamás en la manga de ningún tour importante. Ya bien iniciados los noventa, artistas de primera talla como Sting o Bob Dylan fueron los primeros en presentarse ante el público mexicano, pero sería U2 el primero que desencadenaría todo un fenómeno, logrando abarrotar en cinco fechas el Palacio de los Deportes. Un año después de ZOO TV, Paul McCartney se posaría en tierras mexicanas para promover su álbum "Off the Ground" pero sobre todo, para darle a los cientos de miles de fanáticos de The Beatles en México, el placer de escuchar en su propia voz las canciones que crearon una de las máximas revoluciones culturales del siglo XX. Un icono memorizado por nuestras retinas Fue precisamente ese punto, desde el que Paul arrancó aquella gélida noche. Las luces se apagaron y el público comenzó a pisotear con todas sus fuerzas en las gradas ensambladas del Foro Sol, que simplemente resistía bamboleándose de un lado a otro, sobresaltado por el sismo trepidatorio del "New World Tour", que para esa fecha había ofrecido 70 conciertos en distintas ciudades de los 5 continentes. Los gritos fueron rebasados por la incontenible estridencia de la legendaria canción "Help!" (por cierto, escrita por John Lennon) que comenzó a escucharse, pero no en vivo sino en la versión del álbum homónimo. Paralelamente se encendieron 4 pantallas gigantes, donde aparecieron fotografías con los rostros de los cuatro Beatles, precisamente de los años en que estaba a punto de eludir su época "mop top". No transcurrió la canción completa, cuando comenzó a sonar la canción de "Blue Bird" (del álbum solista de McCartney "Band on the Run" de 1973) para dar paso a imágenes de la época de Wings. Las luces se apagaron nuevamente, y McCartney apareció con los brazos en alto, bajo el torrente de un reflector. Se paró en el centro del escenario mientras el Foro Sol amenazaba con venirse abajo ante tantos gritos y brincos, como ocurriera con todos aquellos estadios del mundo por donde pasó la "Beatlemania" en los 60. Las luces se apagaron y McCartney sorprendió a los presentes una vez más, arrancando la noche con la totalmente inesperada "Drive my Car", del álbum "Rubber Soul" de The Beatles. "Beap, Beap, Beap, Beap, Yeah!" se podía leer en las pantallas, cada vez que Paul desempolvaba aquel irónico estribillo, propio de la era en que The Beatles dejaron de ser un grupo que enloquecía chicas, para convertirse en músicos que exploraron la música en el estudio. "Paul is Live" es un álbum en vivo de McCartney grabado durante la gira "New World Tour", que fue precisamente la que traería al ex beatle por primera vez a México. Desde ese momento, la noche no se detuvo ni un solo minuto. Ese ícono tan memorizado por nuestra retina, a través de décadas de fotografías y videos, estaba finalmente ahí, cantando y viendo enfilar sobre su cabeza los aviones que descendieron aquella mágica noche sobre el Aeropuerto Benito Juárez de la Ciudad de México. La historia de su vida, en una lista de canciones Simplemente, McCartney utilizó aquella oportunidad para relatarnos a los presentes la historia de su vida. Desde las canciones que aprendiera en la pubertad como "Good Rocking Tonight", el "All my Loving" con que abriera en la noche de sus éxitos en el "Ed Sullivan Show" en 1963 (cuando The Beatles conquistaron los Estados Unidos), pasando por su legendario tesoro "Yesterday", su inolvidable "Live and Let Die" de la era con Wings hasta llegar al éxito de ese momento, que era "Hope of Deliverance". Era como revisar viejas fotografías, que a todos nos eran familiares. En una de esas, subió al escenario con la playera verde de la Selección Mexicana de Futbol (que en esos tiempos llevaba impreso un Calendario Azteca enorme) y cantó "Jet", "Can't Buy Me Love", "We Can Work It Out", "Michelle", "Here, There and Everywhere", "Lady Madonna", "Magical Mystery Tour", "Let It Be", "Paperback Writer", "Back in the U.S.S.R.", "Penny Lane", "Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band", "Band on the Run", "I Saw Her Standing There", sin omitir por supuesto el himno generacional "Hey Jude". Claro que se guardó un instante de contemplación, para recordar al amigo de toda su vida, John Lennon, mientras cantaba con todo brío "C'mon People". Esta semana, se ha confirmado que McCartney estará en México el 27 de mayo, y una vez más será el Foro Sol el lugar donde el público mexicano podrá disfrutar del tour "Up and Coming". La estupenda banda con la que Paul se hacía acompañar en aquella temporada (que puede ser vista a su máxima expresión en el documental "Get Back" de 1991), incluía a músicos como Hamish Stuart (guitarra y bajo) Robbie McIntosh (guitarra principal y coros) Paul "Wix" Wickens (teclados y acordeón) y Blair Cunningham (batería). Y por supuesto, no se puede olvidar que aquella imborrable noche, la desaparecida Linda McCartney estuvo codo a codo con su marido, apoyándolo en los teclados, en los coros pero sobre todo, en otro capítulo de su memorable historia de amor. Paul regresaría por segunda vez a nuestro país en 2002, dentro de lo que denominó el "Driving Mexico Tour", pero en esa oportunidad acudió al Palacio de los Deportes. Esta semana, se ha confirmado que McCartney estará en México el 27 de mayo, y una vez más será el Foro Sol el lugar donde el público mexicano podrá disfrutar del tour "Up and Coming". Paul McCartney cuenta hoy con 67 años, y aunque es un hombre jovial y saludable, nunca se sabe si esta será la última vez que tome el aeroplano y la carretera para entonar con su ya cascada voz, todos aquellos temas que han dado palabra a decenas de generaciones. "Up and Coming" es una oportunidad invaluable –quizá una de las últimas- para conectarse con este influyente músico, cuyas canciones no dejan de escucharse un solo minuto en todo el planeta. |
08 abril, 2010
Paul McCartney hará retumbar de nuevo al Foro Sol
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