Luego de la apertura, Paul inició el diálogo en español: 'Hola Buenos Aires, hola porteños'. Otras de las frases fue: 'Esta noche voy a tratar de hablar en español. Pero... también voy a hablar en inglés'. Más exclamaciones: 'Qué bueno, che!', 'Ustedes son buena onda!', 'Son un gran público, qué calor!'. Por supuesto no faltó el recitado de los Tres Conejos. Como en 1993, recordó su época de estudiante y arremetió con: 'Tres Conejos tocando en un tambor, que si, que no, que si lo he visto yo'. Sólo tuvo un inconveniente y fue con la palabra 'Bienvenida'. Fue en el instante que quiso agradecer la hospitalidad del pueblo argentino.
McCartney es el Diego
En la segunda noche, McCartney sorprendió a todos, cuando en uno de los bises regresó al escenario con una camiseta de la Selección argentina. La misma tenía en la espalda el número 10 y el apellido 'McCartney'. "Me parezco al Diego", soltó Paul con total naturalidad.
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