03 diciembre, 2009

SOLO NECESITAS AMOR ( RECORDANDO A LINDA TRAS SU MUERTE)

Paul y Linda McCartney, que han apoyado el trabajo de PETA por mucho tiempo, fueron las estrellas de la cubierta del primer catálogo general de PETA.

Después del fallecimiento, en la primavera pasada, de su esposa Linda, Paul McCartney rechazó solicitudes de entrevista de Larry King, Barbara Walters, y otros reporteros de celebridades. Luego, poco tiempo después del servicio en memoria de Linda en Londres, él llamó a PETA y se ofreció para dar su primera entrevista exclusiva a Animal Times de PETA. No quería hablar de su vida sin Linda. Él se quería concentrar en los animales porque eso es lo que Linda hubiera querido, y quería asegurarle a todos los que se preocupan por los animales que él continuaría el trabajo de Linda.

PETA: Linda fue una gran activista y amiga de los animales. ¿Qué más quisieras que la gente conozca acerca de ella?


Paul McCartney: Toda la gente se sentía a gusto con Linda, y era por su bondad. Ella era muy “cool”, ¡y muy graciosa! Yo me preocupaba, como Linda era una persona tan privada, de que la gente no la comprendería. Pero a juzgar por las cajas de cartas que recibí, sé que la gente sí lo hizo. ¡La amaban! A ella no le gustaba hacer nada que no fuera significativo. Ella comenzó su línea de comidas vegetarianas cuando se dio cuenta de que podía salvar animales.

Es por eso que nos gusta tanto lo que ustedes hacen. Me encanta todo lo que PETA hace, especialmente el título. Personas por el Trato Ético de los Animales – No sé cómo alguien puede tener un problema con eso.Podría hablar por horas acerca de Linda. Estoy afligido, pero le digo a los hijos, “tenemos que fijarnos en las bendiciones y borrar todas las memorias tristes con las buenas”. Yo creo que la mejor idea – hacerse vegetariano – la tiene enfrente de usted. Y si es cierto, todo esto que creémos, me hace pensar que era muy bello lo que Linda hacía al finalizar el siglo. Es un hecho muy bello que lo hizo todo. Ella mostró el camino, y ya estamos listos. Es típico de ella, el prepararnos el camino.Vamos a continuar con todas las campañas de Linda.

Vamos a seguir con su buen trabajo. Haremos los recetarios, haremos la comida vegetariana, haremos las campañas. Vamos a mantener la antorcha encendida.

PETA: Después de la muerte de Linda tú sugerías que la gente podía honrarla haciéndose vegetariana.

PM: Yo sugería que la gente donará a una caridad para el cáncer o a un grupo a favor del bienestar de los animales – o el mejor tributo – hacerse vegetariano. Desafortunadamente, fue un poco muy general. Yo sé que PETA ha hecho un buen trabajo indicando las caridades que no hacen experimentos con animales, y quiero ser claro: Estoy totalmente en contra de usar a los animales. En la noche del día del servicio en memoria de Linda, en Nueva York, vi un programa. Mostró a perros y gatos arrastrándose porque tenían el espinazo quebrado. El comentarista decía, “Estos animales son cuadrúpedos y nosotros somos bípedos, así que no vamos a aprender mucho de ellos porque somos tan diferentes.” Fue horroroso. No tiene sentido. El argumento médico no tiene base.Aun si tuviera, no creo que debemos matar a otras especies. Pensamos que somos mucho mejor, pero no estoy seguro de que lo somos. Le digo a la gente, “Hemos obligado a golpes a todos los animales en la faz de la tierra a estar sometidos, claramente estamos ganando cualquier batalla que haya entre las especies. Realmente creo que ya es tiempo de ser amables. Podemos ser generosos. No hay necesidad de continuar el trato a golpes. Creo que necesitamos demostrar que somos bondadosos.

PETA: Siempre te han preocupado los animales, ¿no es así? ¿Cuándo descubrieron, tú y Linda, que compartían esta pasión por hacer una diferencia?

PM: Sí, estoy consciente de los animales desde hace mucho tiempo. Cuando crecía en Liverpool, teníamos servicio nacional, y llegaba el momento de ingresar al Ejército. Yo sentía pavor. Conocía a muchos machos que al regresar decían, “Te hará hombre”. Pero yo pensaba, “No puedo matar a nadie”. Comprendí que tenía que aprender a matar. Así que me metía al bosque a matar ranas – Linda se asustaba con esta historia. Pero yo pensaba, ¿si no puedo matar a una rana, cómo voy a clavarle una bayoneta a un hombre? Cuando razoné que estaba maltratando animales, de repente surgió la pregunta ¿Qué estoy haciendo? Eso me hizo cambiar, y un día en el bosque tomé una decisión, servicio nacional o no, ya no lo voy a hacer más. Comprendí que era una locura, y le pido disculpas a todas las ranas.Después, cuando estaba con los Beatles, yo tenía una bella perra llamada Martha. Escribí una canción para ella, “Martha My Dear”. A John Lennon le divertía ver que yo era diferente cuando estaba con la perra y la tenía trepada encima de mí.La verdad es que siempre he amado a los animales, pero tenía miedo de amarlos demasiado. Era como los hijos de granjeros. Llegan a conocer bien a Daisy, la vaca, y luego un día el granjero les dice, “Bueno, se tiene que ir al mercado”. Los niños lloran pero les dicen, “Tenemos que hacerlo. Es una realidad de la vida”. Me dan mucha pena, y los granjeros también, porque están negando lo que realmente está sucediendo. Creo que Linda me liberó. Nos liberamos mutuamente.A través de los años, tuve el lujo de que Linda se puso al frente de nuestro trabajo para ayudar a los animales. Pero siempre trabajabamos juntos. El compromiso de ambos era 100 por ciento.

PETA: Y luego, al criar a tus hijos, les enseñaste que los animales tienen sentimientos.

PM: No los forzamos. Sólo les dimos una educación. Les aclaramos por qué dejamos de comer carne. Les dijimos, “Es un pollo de verdad, con una cara y un corazón”. Heather tenía 6 años de edad y estaba acostumbrada a una dieta de carne, pero Mary estaba muy pequeña y el cambio fue fácil. Stella y James nacieron para ser vegetarianos. Son chicos con compasión, se preocupan por los seres vivientes, y ahora son todos vegetarianos. James es vegetariano estricto. Una vez, Stella llegó a casa y dijo, “Hoy tuvimos una discusión en la escuela acerca de las granjas-fábricas. ¡Yo realmente tenía la conciencia tranquila!” Linda y yo nos miramos y dijimos, “Qué cosa tan bella para dar a tu hijo – una conciencia tranquila”. Lo recuerdo como si hubiera sido ayer.

PETA: Has hablado de la vez que viste a unas ovejas jugar en un campo, y comprendiste que ya no podías comerlas más. ¿Ese fue un momento de cambio?

PM: Fue uno de ellos. Otro sucedió al principio de nuestra relación cuando yo estaba pescando y picó uno. Comprendí que lo estaba matando cuando lo sacaba y pensé, “Le estoy quitando la vida – y no quiero hacer eso”. Así que lo regresamos al agua. Eso fue el fin de la pesca. Seguimos comiendo caviar por un tiempo porque pensabamos que nadie era dañado. Pensabamos que alguien “ordeñaba” al pescado para sacarle los huevos. Luego supimos que a la madre esturión la abren por la mitad y los huevos caen. Eso terminó con el caviar.Otro momento de cambio fue cuando ibamos manejando detrás de un camión lleno de pollos – cinco o seis hileras de pequeños pollos con sus plumas de fuera. Nos parecieron muy simpáticos y Linda les tomó unas fotografías. Luego, el camión entró a una fábrica llamada Super Chick, y de repente comprendimos lo que les esperaba. Eso realmente nos afectó.Extrañamente, hace cuatro meses, veníamos manejando y regresando de Londres cuando llegamos a un lugar donde sabíamos que había un matadero. Encontramos a un camión con cuatro hileras de ovejas. Sabíamos exactamente a donde iban. Conocíamos esa desviación. Nos rompió el corazón, y más con todo lo que le estaba pasando a ella. Sabíamos que las ovejas no verían la luz del día siguiente. Derramamos unas lagrimas y seguimos manejando.Le dije, “Está bien, mi amor, tenemos que intentarlo y no dejar que esto nos afecte mucho. Sólo vamos a seguir con nuestro trabajo. Es todo lo que podemos hacer”.

PETA: Así que tu compromiso sólo se ha hecho mas fuerte con los años.

PM: Así es. No tengo nada que lamentar. No extraño ningún plato de carne en absoluto. Extraño el olor del tocino, pero no lo tocaría porque sé de donde viene. Cuando veo tocino, veo un cerdo, veo un pequeño amigo, y es por eso que no lo puedo comer. Es tan sencillo como eso”. Pero sí comería el tocino vegetal de Linda. Toda su comida era tan buena. Una vez, vino Steve Martin a una parrillada. Yo estaba en la parrilla y el dijo, “Ah no, no puedo comer nada de eso”. Le pregunté por qué no y dijo, “Lo siento, soy vegetariano”. Yo dije, “¡¿No sabías que nosotros lo somos?! ¡Todo lo que está en la parrilla es vegetariano!” Él dijo, “Ahhh” y se comió tres hamburguesas vegetarianas, y preguntó dónde podía comprarlas.Yo creo que en el futuro hasta Mcdonald’s se hará vegetariano, porque sé que será más económico para ellos. No tendrán que pagar a tanto granjero por engordar a todos esos animales, para luego llevarlos a los mataderos. ¡Eso será una era feliz!

PETA: Sería mejor para nuestra salud, y para el planeta también.

PM: Si alguien quiere salvar al planeta, todo lo que tiene que hacer es dejar de comer carne. Es la cosa más importante que usted puede hacer al respecto. Es asombroso si se pone a pensarlo. El vegetarianismo por sí sólo es la solución de muchas cosas: ecología, hambre, crueldad”. Y es una cosa espiritual para usted. ¡Vamos a hacerlo! Linda tenía razón. Hacerse vegetariano es la mejor idea para el siglo nuevo.

PETA: ¿Qué le dirías tú a la gente con compasión que sigue el ejemplo tuyo y de Linda?

PM: A veces, parece una larga y dura batalla. Yo realmente puedo imaginar que cualquier persona con corazón y cerebro puede ser afectada enormemente por la desesperación. Yo creo que todos decimos, “¿Cómo me metí en esto?” “¡Yo no quería saber!” Pero la bombilla se ha prendido en nuestras cabezas y no la podemos apagar. Claramente, estamos en el camino correcto. Creo que lo que se tiene que hacer es respirar hondo y contar nuestras bendiciones. Encuentre una bendición que llene su corazón. Las hay. Ahora más que nunca. Cada año, miles de millones de animales son matados sin pensarlo. Es un pensamiento desesperado. Hágalo a un lado, porque ahora hay más vegetarianos que nunca antes. Hay sociedades como PETA a las que se puede unir. Hay gente que piensa igual que usted con las cuales puede hablar. Ahora hay mucha esperanza.

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