El ayuntamiento de Liverpool quiere derribar la casa en la que Ringo Starr pasó parte de su infancia, en en el 9 de la calle Madryn, como parte de un plan de reordenamiento urbano. Pese a la oposición de los fans de los Beatles.
Durante las últimas semanas, cazadores de recuerdos de los Beatles se han dedicado a arrancar ladrillos y otros elementos de la casa, lo que ha provocado que el Ayuntamiento la rodee con una valla metálica para evitar que con el deterioro del edificio se produzca un accidente.
Philip Coppell, presidente de la Save Madryn Street Society, ha manifestado su malestar por la medida: “Es desalentador ver que el Ayuntamiento haya tomado medidas para poner fin a las actividades de los cazadores de recuerdos. Los fans de todo el mundo se han opuesto a la demolición y todavía tenemos la esperanza de que podamos convencer a la ciudad para que revoque la orden de demolición”.
Por su parte, la Beatles Society quiere organizar una subasta benéfica con los ladrillos, reservando algunos para el museo de la ciudad
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