Quienes vieron aterrizar una aeronave, seguida de cerca por hombres vestidos de traje y escoltada por autos negros, se dieron cuenta que en la tripulación llegaba una celebridad. Pero también quienes lo vieron descender en el aeropuerto internacional Salgado Filho, se frotaban los ojos, agradecieron las plegarias y se pusieron rojos de alegría: Paul McCartney regresaba a Sudamerica, se reencontraba con sus fanáticos brasileños.
Esta mañana, a las 11.15 hora Porto Alegre, aterrizó el Jet que lo traía a Paul, junto a su novia Nancy Shevell. Vestido con traje y corbata y anteojos negros, Macca se metió rápidamente en el auto que lo depositó tiempo después en el Hotel Sheraton.
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