Ser hija de Paul McCartney pesa, para bien o para mal. Los años 90 fueron testigo de cómo personajes de la moda se preguntaban si esta joven británica realmente tenía madera para el diseño o sólo estaba cumpliendo un capricho a expensas del apellido familiar.
Tal vez su trabajo de graduación del colegio Central St. Martins de Londres, en 1995, no fue la prueba más contundente: su desfile presentado en aquel entonces contó con la participación de las modelos Naomi Campbell y Kate Moss, quienes caminaron al ritmo de un tema escrito por su padre para la ocasión.
Con el paso de los años, la balanza se inclinaría a favor de Stella. En 1997 fue nombrada directora creativa de la marca Chloé, labor por la que obtuvo más comentarios positivos que negativos. Cuatro años después, se convirtió en la primera diseñadora mujer en firmar con el Grupo Gucci para lanzar su marca homónima.
DE ALMA ECO
La preocupación de esta creadora por el medio ambiente ha formado parte de su discurso personal y de su firma, de ahí que se le identifique como la creadora del lujo sustentable. Su convicción de no usar pieles en sus colecciones y apostar por tejidos orgánicos siempre que le sea posible, ha otorgado valor adicional a sus diseños, que son muy demandados por las celebridades y fanáticos de la moda.
De hecho, en 2008 se disgustó con su amiga Gwyneth Paltrow, quien aceptó prestar su imagen a la marca italiana Tod's, que se especializa en hacer zapatos y bolsas de cuero. A través de sus campañas publicitarias y su página web, donde se encuentran desde tips ambientales hasta productos sustentables, la británica evidencia sus valores ecológicos.
A lo largo de 15 años de carrera, Stella ha realizado colaboraciones con firmas como Adidas y H&M -cuya colección especial se vendió en tiempo récord-. El año pasado se le encomendó diseñar los uniformes olímpicos portados por la delegación de su país.
En cuanto a sus reconocimientos, ha recibido en varias ocasiones el British Fashion Award como la Diseñadora del Año. Asimismo, hace unos meses le fue otorgada la Orden del Imperio Británico de manos de la reina Isabel II.
Gracias a su talento y trabajo, Stella McCartney ha acallado a quienes la señalaban únicamente como "la hija de", para ser considerada hoy en día una de las diseñadoras con mayor éxito.
fuente:
http://www.eluniversal.com.mx/articulos/78108.html
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